Aquí tenemos un dibujo del siempre genial Quino. En él, como en otros muchos, hace una crítica ácida de la religión. La hace ahora, porque durante la dictadura eso le hubiera traído muchos problemas. Una de las frases de Videla:
Un terrorista no es sólo el portador de una bomba o una pistola, sino también el que difunde ideas contrarias a la civilización cristiana y occidental.
Estoy seguro que cierto miserable bigotudo estaría muy de acuerdo con la anterior afirmación.
Hoy en día Quino es libre de poder dibujar en su país la anterior viñeta, y poder difundirla y ser publicada en el nuestro. Habrá quien estará de acuerdo, habrá quien no, pero tiene el derecho de mostrar de hacerlo.
¿Y si Quino, en vez de ridiculizar la creación bíblica del mundo, hubiera fijado su pluma en un capítulo del Corán? Ya la teníamos armada: se le acusaría de provocador, de islamófobo, de racista...
Hemos ganado el derecho a hablar en libertad, a criticar y ridiculizar todas las ideas. Las ideas, incluso las religiosas, no son sujeto de derecho. Las ideas no tienen derechos, pueden ser atacadas, destruídas, humilladas y pisoteadas. De hecho es lo que se DEBE hacer con ellas. Si una idea merece ocupar su puesto en nuestra cabeza antes debe de someterse a la dura prueba de la vivisección por el bisturí de la fría y dura razón, a la abrasión de la burla de los que piensan de modo distinto. Si esa idea resiste sin perder solidez en sus argumentos, y sólo después de haber pasado esas pruebas, merece ser pensada por alguien inteligente.
A la religión cristiana le está costando someterse a la prueba, las iglesias están cada vez más vacías, hay un amplio sector que está parcialmente en contra de las enseñanzas oficiales... se están dando cuenta de que la libertad de conciencia DUELE.
La religión musulmana NO se quiere enfrentar a esa prueba. No está acostumbrada ser enjuiciada, sino sólo acatada sin rechistar. Como todas las religiones, por otra parte.
Cualquier chorrada se interpreta como una ofensa al islam. Pues si, bien ¿y qué? Para ofensa al islam el siguiente credo: Creo que tu Dios no existe; creo que tu profeta es un santón iluminado, probablemente de una insolación; creo que tu religión es un conjunto de ritos idiotas, creencias estúpidas y normas sojuzgantes.
A quien le moleste que yo piense así, es que es imbécil de nacimiento. Que él crea en lo que quiera creer, en lo que su inteligencia alcance, en lo que su conciencia le permita, y que me deje a mi con mis ideas. Si le molestan, es que no ha entendido lo que significa vivir en una sociedad donde existe libertad de expresión, de conciencia y de culto. Ya está bien con que tal o cual cosa es una ofensa al Islam. ¿Y? ¿Tan débil es su idea que no resiste ni que la toquen? El mero hecho de existir personas que no creen en su Dios es ya de hecho una ofensa para Allah, ya que con nuestro testimonio le negamos. ¿Y? ¿Nos van a matar a todos?
La libertad de culto no le viene bien a las religiones monoteístas, ya que su fuerza estriba en no ser UNA opción, sino en ser la ÚNICA opción, ya que los demás dioses son falsos. Sólo puede haber un Dios, y por lo tanto una Iglesia y un camino a la salvación.
No puede ser que un mismo Dios diga: "come cerdo" a unos, y "no lo comas" a otros. Dios no puede ser tan inconstante y arbitrario en sus mandatos. Así que, si una religión es revelada por el único Dios, la otra no puede serlo.
Igual que lo del puto velo musulmán. ¡Pues claro que llevar velo es una mierda! A decir verdad, llevar cualquier prenda de ropa, más allá de por la necesidad de abrigo, es una mierda. Me cago en el chador, como me cago en la mantilla o rebeca de la rancia tradición católica. Considero que toda doctrina que tache el cuerpo humano desnudo de impudicia es un ataque a la dignidad humana, y es perjudicial para el equilibrio mental y emocional de la persona, es una enseñanza que sólo aporta al individuo miedo y rechazo de sí mismo. Si además estas enseñanzas se ceban en el cuerpo de la mujer, además de perjudiciales son machistas.
Y si Dios ha revelado eso, Dios es un cabrón, homófobo y machista, un reprimido sexual que, rabioso por no poder compartir su soledad avara, castiga al ser humano dando forma de revelación a sus miedos, para convertirlos en doctrina.
Dios Padre es un viejo viudo impotente; querría acostarse con su criatura, la mujer. Como no puede, la cubre de vergüenza para que no pueda disfrutar en libertad de lo que su madre, la Naturaleza, le legó.
Ese es el Dios de Abraham, el Dios único que nació en el desierto de Siria hace 4500 años, y se ha extendido por todo el mundo de la mano de las tres grandes religiones, cada una con sus subdivisiones y divisiones de divisiones. Todas ellas creyéndose el tronco principal y las demás, ramas desviadas de esa fuente origen de toda verdad.
¿Dios existe?. Lo ignoro. Me molesta la gente que no admite la pregunta y responde categóricamente antes incluso de empezar a pensar. La fé es el nombre que le ponen los sacerdotes a la ignorancia y la insensatez. La duda, condenada por todas las religiones, es el don más precioso del ser humano, es quizá la prueba de que Dios existe y somos parte de Él. La duda, sin embargo, es el peor enemigo de la doctrina, de la idea deglutida sin masticar. De la idea de otro incrustada en nuestra conciencia. La duda es el mayor peligro para el que quiere ostentar el privilegio de tener el teléfono de Dios, y no quiere pasarnos su número. La duda, la libertad de pensamiento, es lo que nos hace hijos de Dios, y lo que nos libera de la esclavitud de otros hombres.
Las religiones han esclavizado al hombre.
Quizá este mundo que vivimos necesite de una mayor espiritualidad. Quizá debamos de buscar a un Dios, quizá ni tan siquiera haya Dios pero si redención, como nos enseñaba el Gautama.
Lo que está claro es que el Dios de los curas, de los imanes, de los rabinos es falso. Es falso porque de existir, sería un ser cruel y envidioso, que llama a la destrucción de los que adoran a otro, que no atiende a las súplicas de sus hijos que le necesitan. Un Dios imbécil que se mete a legislar sobre cuestiones de higiene, de costumbres sexuales, culinarias. Que se preocupa de que la falda sea más o menos corta, de que no te masturbes o te folles a tu semejante hasta que Él lo permita. Un Dios mojigato, un Dios de pacotilla, un Dios de chismorreo y maledicencia.
Ése es el Dios que nos ofrecen para que creamos. Un Dios absurdo, una carallada de Dios. Existen tantos Dioses como personas. Todos nos creamos un Dios a nuestra imagen y semajanza, no al reves. Mahoma creó el suyo, apto para sus circunstancias, guerrero y sobrio, generoso y vengativo. La idea de Dios es un reflejo del superego de la persona. Por eso le llamamos Padre. Es el Padre que nos hubiera gustado tener.
El hombre bondadoso se construye un Dios bondadoso; el hombre violento uno que le absuelva de sus tropelías (y bendiga, hisopo en mano, sus cañones). El que tiene disfunciones sexuales (psíquicas o fisiológicas) se crea un Dios castrante, sólo hay que oír la voz aflautada con que cantan los Obispos de la Conferencia Episcopal. El soberbio construye un Dios arrogante; el acobardado y pisoteado uno que le defienda, a quien encomendarse...
A todos esos Dioses, luego le ponen un nombre único. Pero cada uno, en sus oraciones, se dirigen al suyo, al que siente cerca de sí. A su criatura que han creado para darle sentido a esta mala broma que es la existencia.
Puede ser que exista un Ser Superior, llámesele una Conciencia del Universo, sea el Acto Puro o la Potencia infinitamente actualizada...
Lo que me parece de todo punto evidente es que el Dios que nos presentan los sacerdotes de las tres grandes religiones (con sus ramas y ramitas) es un Dios aborrecible, caprichoso, irascible, cruel, mojigato, machista, homófobo...
Una mierda de Dios como reflejo de los mierdas que lo han creado.
Por favor: leed el Corán. Leed el Antiguo Testamento. Leed los Hechos y Cartas de los Apóstoles...
El que aplique esos libros; escritos hace centurias en lugares donde la vida humana no valía nada y la razón menos; el que los aplique a su vida diaria en sociedades occidentales o es idiota o está loco de atar (y encerrar).
Antes que lapidar a una puta prefiero hacerlo con un cura. La puta no tiene más culpa que la de ser pobre, no engaña a nadie (puede que sea la mujer más honrada del mundo, pues su tarifa está a la vista), no divide a las personas en buenos y malos, tan sólo en clientes asíduos y potenciales clientes, no te exige que creas en ella, sólo que confíes en lo que sabe. Las putas no joden a quien no quiera, y quien es jodido, acaba contento. Los curas de todas las religiones se empeñan en jodernos la vida a todos, y al que se la joden, se la joden bien jodida.
En resumen a todo esto:
¡Menos curas y más putas!
Todo esto nació de lo que iba a ser un dibujo y dos líneas para meter el enlace a éste par de artículos que he encontrado mientras meneaba (que no me la meneaba). Lo que me enrollo. ¡Cualquier excusa es buena para no empollar! Bueno, aquí están los artículos:
El islamismo y los ingenuos
Alegato contra las religiones (por los Derechos del Hombre, contra las teocracias)
Espera, que sigo:
El problema es identificar idea con persona. Una idea, una persona. Una persona o creyente que sólo tiene una idea. Si ofendes a la idea, ofendes a la persona.
El Islam tiene algo muy perjudicial: desde su nacimiento tuvo aspiraciones de convertirse en una norma de convivencia social. La Teocracia está implícita en la enseñanza de Mahoma, que construyó una nueva sociedad de creyentes. Así que la identificación no es sólo idea=persona. Sino idea=sociedad.
Una crítica religiosa se interpreta como un ataque a todo un país. Esto es peligrosísimo, y un error demoniaco.
En los albures de la civilización, con intercambios humanos (culturales y materiales) limitados, las sociedades eran muy homogéneas: con una historia, unas tradiciones, una lengua y una religión comunes (el conjunto de conocimientos que dan lugar a una etnia). Por supuesto, también racialmente eran muy similares, el asilamiento propiciaba la endogamia.
Según se fueron desarrollando las sociedades, se fueron introduciendo elementos propios de otras etnias, que reaccionaron creando una diversidad que enriqueció tremendamente y aceleró el progreso cultural de las naciones que se beneficiaban de ese tráfico. Las sociedades empezaron a tener una mayor diversidad (racial, religiosa...). Eso es una sociedad madura, en la que un grupo de personas que habita un mismo territorio se autodefine como sujeto de derecho (autodeterminación) y se dota de leyes y órganos de gobierno.
Como ejemplo de todo esto puede servir la sociedad del Imerio Romano (sin entrar en las diferencias entre romanos, latinos, foederae...). Todos son ciudadanos de Roma, todos pertenecen al mismo Estado, a pesar de tener lenguas maternas, historias, ritos e incluso colores de piel distintos. Y sobre todo: diversidad de dioses, tema en el que los romanos eran extraordinariamente tolerantes (solo rechazaban los ritos druídicos por su exagerada crueldad, que tome nota el que crea de los druidas lo que vienen en los tebeos de Asterix). Los cultos dionisíacos fueron perseguidos intermitentemente porque en ocasiones acababan como el rosario de la aurora (asesinatos, violaciones...). El cristianismo fue muy poco perseguido, a pesar de lo que diga Holliwood (no hay ninguna prueba histórica de que ningún cristiano fuera arrojado a las fieras).
Roma, igual que un Estado moderno, era una sociedad diversa cuyo nexo de unión era la sumisión a unas leyes y unos poderes públicos comunes.
En los Estados teocráticos, esta distinción desaparece. Son concepciones de la sociedad arcaicas, cavernícolas, como la que mostró nuestro expresidente diciendo que los musulmanes tenían que pedir perdón a los españoles...blablabla, dejando ver que un musulmán NO puede ser llamado español. A decir verdad ni Boabdil ni Pelayo eran españoles, porque de aquella España no existía (mal que les duela a algunos, que consideran que España es eterna). Pero tanto derecho tenía uno como otro a la tierra.
Esa identificación entre lo religioso, lo étnico y lo político es peligrosísima. La misma idea de la Reconquista, como si España no pudiera ser más que cristiana, y los musulmanes aquí fueran unos usurpadores.
Desde el mismo Estado de Israel se quiere hacer confundir judío, hebreo e israelí. Cuando es absolutamente falso, ya que puede (y de hecho hay muchos) israelíes de fe musulmana, judíos de nacionalidades varias repartidos por todo el mundo, o israelíes, la gran mayoría, que siendo judíos no son hebreos, sino de etnias diverdad (aunque les joda). Desde shefardíes a caucásicos, germanos, moros...
Si, moros judios, el Norte de África fue el refugio de muchos judíos que huían de las persecuciones cristianas. Lo que dice mucho de la tolerancia de la fe musulmana al resto de las religiones en unos tiempos en que el cristianismo era la más criminal de las confesiones. Hoy parece que cambian los tiempos, y la fe que un día llevó a la Península a su mayor grado de desarrollo, libertad y cultura, sólo superados muchos siglos más tarde por la Ilustración, la religión de la razón...esa fe ahora está ligada a las dictaduras, el atraso económico, la falta de libertades y la injustica social. Son paises islámicos los que ostentan las primeras posiciones de desequilibrio social, muertos de hambre al lado de fantasiosas fortunas pagadas con acaparar para una sola familia lo que pertenece a todo el puebo: los recursos. Se jodan si ellos lo consienten.
Esa confusión lleva a identificar musulmán con árabe, cuando ni mucho menos todos los musulmanes son árabes (pueblo semita al Sur del Sinaí). Hay más árabes en Alemania que en Marruecos, la invasión de la Península no traería más que a unas pocas decenas de árabes -los generales- el grueso de las tropas eran bereberes y moras.
Lo que sí que es una pena es que prácticamente todos los árabes son musulmanes. Igual que hace unas décadas todos los españoles éramos católicos: porque no había libertad para elegir otra cosa. Árabes habrá que se caguen en Allah (moros he conocido unos cuantos), pero lo harán con la boca chica, no les vayan a oír y paguen con su vida el humano derecho de rebelarse contra la injusticia de la vida.
La tendencia uniformizadora de las sociedades las empobrece y embrutece. Una España católica que hable castellano, un Marruecos islámico donde sólo se hable árabe (el árabe en su expansión ha destruído muchas otras lenguas, y otras que se resisten y pronto caeran; es la tragedia de un idioma que se identifica con una religión y se asocian ambas al poder político).
Una sociedad rica es una sociedad diversa, con ciudadanos libres con ideas propias, no un ejército de creyentes identificados con el pensamiento común, con la idea única (sea la religión coránica, sea el consumismo hedonista, sea la puta sociedad de castas hindú...).
Una sociedad moderna admite la diversidad, y ve natural la crítica. Un científico que reaccione como un demente cuando otro colega publica un estudio contrario a sus posiciones, no es digno de llamarse científico: es un creyente. Ha interiorizado su verdad hasta el punto de identificarse con la idea, de matar su independencia, su personalidad, para ponerse al servicio de la idea.
Las ideas se atacan, las personas se respetan.
No veo mejor forma de respetar a los pueblos del Norte de África, con culturas que admiro y que son parte de nuestra historia y nuestra cultura, que son algo propio y cercano...no veo mayor favor que hacer a esas culturas...que ayudar a quitarse el yugo de la religión. Porque se merecen mucho más que obedecer las enseñanzas de un analfabeto (por suerte hecha una doctrina más o menos comprensible y coherente por grandísimos teólogos, que hicieron lo que pudieron con el desbarajuste de suras, muchas veces absurdas y contradictorias que es el Corán). Porque mientras no se liberen de sus cadenas, como los europeos nos liberamos de las nuestras, y proclamen el triunfo de la razón, no podrán ser ciudadanos.
O eres fiel al Dios del Estado, o eres fiel a tu conciencia (y a tu Dios). Sólo una religión practicada por personas libres puede ser verdadera. Un pastor cuida ovejas, el Ser Supremo, de existir, quiere hombres libres.
Desconfío del que ama a Dios y mata al prójimo. Que los Dioses amen a los dioses, los humanos hemos de amarnos entre nosotros, porque no veo que los lobos se devoren entre ellos.
Un 100% de musulmanes en los Emiratos Árabes es lo mismo que las elecciones en Iraq, en que Sadam ganaba por un 97%. No había otra elección.
Por un Estado laico, que no coaccione al individuo (Santa coacción que decía San Escrivá) en sus opciones de vida. Por una religión tolerante, libre de violencia y de miedos, de ritos, de verdades reveladas, de prejuicios seculares, de superstición e irracionalidad. Por la erradicación de la incultura que los genera, del miedo que los alimenta, de la opresión que se sirve de ellos para medrar.
Mi Dios:
LA LIBERTAD
4 comentarios:
Buenas...buscando una foto el buscador me llevó a tu blog y entre tantas fotos me detuve en la de caperucita.Luego de leer tu comentario sólo quiero decirte algo : Dios te ama, y aunque vos no creas en EL, El si cree en vos. Por más q lo niegues, o escribas todo lo q escribiste EL te sigue amando. Te preguntarás el motivo del posteo del comentario...no es contrarestar lo q vos decis, pero sí decirte q te hablo de lo q conozco y por lo q vos decis no lo conoces a Dios. El desafio q te des a vos mismo la oportunidad de conocer a Jesús.A mi me cambió la vida...y EL puede hacer lo mismo con vos...si lo dejas.
Te mando un abrazo, espero hayas interpretado la esencia de estas líneas: en ningún momento es entrar en una discusión, sino q leas un poco de alguien a quien Dios le cambió la vida y decirte q todo lo q escribiste acerca de Dios es porque no lo conoces, cuando lo conozcas...preparate, porque Dios te va a sorprender.
te dejo mi mail x si te interesa seguir conversando:matydefran@yahoo.com.ar.te dejo el link de un compatriota tuyo...http://www.marcosvidal.com/
Bueno, gracias por el interés. Una pregunta: vos no sós católico, verdad?
Aunque no te lo creas, tengo bastante respeto intelectual por los católicos (los de formación teológica seria, o sea, casi nadie). La doctrina católica, como la fe musulmana, lleva miles de años puliéndose por gente preparadísima y forma una unidad de doctrina muy sólida. Me gustan los edificios bien hechos.
Otra cosa que me agrada de los católicos (y en principio de los musulmanes, así se lo manda el Corán) es que no intentan hacer proselitismo. Te lo digo yo, que tengo un piso de mormones en frente (los pobres deben estar amargados, porque solemos andar en bolas por la casa; se la deben luego pelar con el poster de Jesús que tienen en el salón).
Sin embargo, estas nuevas religiones venidas de la piara intelectual que se encuentra entre México y Canadá, y con gran arraigo en Sudamérica (aunque creía que en Argentina la Iglesia seguía controlado ferreamente las conciencias) merecen mi más absoluto desprecio intelectual. Aquí en España, evangélicos, adventistas....sólo captan a los gitanos, que encuentran una Iglesia que les haga caso después de siglos de desprecio de la Iglesia Católica.
Las manidas expresiones de "Dios es amor", "Dios te ama", "Dios me ha cambiado la vida"...destinadas a un público de bajísima cultura. Como dije antes, cada uno se crea su propio Dios. Los tontorrones se crean un Dios tontorrón, que necesitan para darle algún orden a su vida. ¿Acaso necesitas a Dios para dejar de emborracharte, pincharte y andar delinquiendo?. ¿Necesitas que un Dios te diga no mates para que no vayas buscando camorra? ¿Necesidad de una autoridad externa para dirigir tu conciencia? ¿No te basta el amor al hombre, para que busques en el amor a Dios la forma de ordenar tu vida?
Nadie sabe si Dios existe. Pero el hombre está ahí, en la puerta de al lado, por la calle, en la selva o en el metro. Necesitas que alguien te diga "ámalo" para que lo ames? ¿Lo amas por ser la creación de tu Señor, porque Él así te lo manda?
¿Dios amaba al que fulminó con un rayo por tocar el Arca de la Alianza? Y eso que lo hacía para ésta no se cayera. Tú imagínate que en vez de ser un Dios fuera una persona, que custodia algo valiosímo, el David de Miguel Ángel, por ejemplo, y no se puede tocar. Una persona ve que el David cae y se va a hacer añicos y acude a salvarlo. Llega el guardián y le pega un tiro.
¿Es esa para tí la idea de amor? Eso no lo haría ni el más feroz de los criminales, devolver bien con mal. Eso lo hace Dios, según el libro que tú consideras sagrado, y yo considero un refrito de un pueblo de bandoleros de las leyendas que circulaban por el mundo Sumerio (mucho más creyente, pacífico y tolerante que las tribus de analfabetos que hacían razzias sobre Ur, Isin, Uruk...
Vuelvo a repetir: de existir Dios habría que matarlo.
Lo primero: que no conozco a Dios. No, claro, no hemos sido presentados. ¿Acaso tú si lo conoces? No, porque si lo conocieras, no haría falta que tuvieras fe.
Lo segundo: Dios, en el cual dices que no creo y que yo te respondo que no descarto su existencia, lo identificas con un tal Jesús de Judea, alias el Cristo. ¿Porqué? Bueno, en tu entorno esto puede ser evidente, pero entenderás que es sólo una de las posibilidades. No es ni mucho menos evidente, compañero. A decir verdad, hay en la hsitoria gente que me ha parecido más honrada que el Cristo, más tocada por la divinidad (el Mahatma, por ejemplo).
Lo tercero: Por favor, no te disculpes por llevarme la contraria, yo no lo hago. Aquí se entra para discutir, y aprecio toda idea que se aporte. Amo la controversia, la batalla dialéctica. Yo no soy ningún sacerdote, no condeno a nadie a ningún infierno por llevarme la contraria. No tengo línea directa con Dios, no cago verdades.
Cuarto apunte: Si Dios me cambia la vida, le meto cuatro ostias. Te aseguro que tengo una vida de putísima madre para que venga nadie a cambiármela. De todas formas, a los que veo que su vida no les va tan bien, suelen ser en paises donde la religión marca el compás de los tiempos. A ellos parece que Dios no les ha cambiado mucho su vida: trabajo, hambre y humillación. No se si Karl Marx es el hijo de Dios, no sé ni tan siquiera si decía verdad, lo que está claro es que ha hecho mucho más por el bienestar de la humanidad de lo que ha hecho tu Dios y los que se dicen sucesores de Pedro, los que cagan verdades y por su boca habla el Altísimo, ya sabes.
Quinto: Si Dios quiere sorprenderme, lo tiene fácil. Pero está claro que no está por la labor. Ya no hay milagros, ya no hay apariciones. Será que no hay fe. Será que hay ciencia. Será Dios vergonzoso, quien sabe.
Lo que si me sorprende son las cosas que se pueden hacer por Dios. Dios existe, no lo dudo: en la cabeza de los creyentes, en la conciencia común de las sociedades. Ese "efecto Dios" lleva a los pueblos a automortificarse, a cargarse de leyes inhumanas y antinaturales, a matar a otros pueblos...
Ese Dios es tan real como los monstruos debajo de la cama del niño. Cuando enciendes la luz, no se manifiesta. Sólo lo hace en las tinieblas. Cuando el niño crece, los monstruos se van. Eran sólo la substancialización de los miedos del niño. Existían, porque condicionaban el comportamiento del niño, pero ya no están.
Un sincero abrazo, puedes volver por aquí cuando quieras. Yo no me atrevo a decirte en lo que debes creer, sólo te recomiendo que estudies, leas, aprendas. Busca la verdad, sin miedo a lo que te puedas encontrar.
P.S: Yo no me atrevo a hacerte recomendaciones musicales, ya que mis inquietudes musicales van por otros derroteros (soy un buen y gran aficcionado a la música satánica). Sin embargo, quizá te podría gustar en el estilo este compatriota tuyo: Atahualpa Yupanqui.
En nombre de ese "Dios es amor" y de la cultura occidental y cristiana (y capitalista, que eso se les olvida decir) los militares le machacaron las manos para que no pudiera tocar. Siguió tocando. Quizá no haya salido nada más bello de ese continente. No está mal para ser un mestizo.
Por sus actos los conocereis...
Me he quedado flipada con la contestación. Muy buena. Sin comentarios.
Veñes de facer un :P
Por certo, a canción de Atahualpa que quería recomendarlle o meu amigo arxentino é: "Preguntitas sobre Dios". Está na muliña, por se quere escoitala.
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