La idea de que no se puede hablar con terroristas, aunque suene bien a los oídos...es una barbaridad. Hablar, se ha de hablar con todo el mundo. ¡Ojalá pudiera yo hablar con algún terrorista de ETA! ¡Ojalá que tuviera a Ben Laden enfrente para poder intercambiar opiniones! Puede que esos fanáticos hayan hablado demasiado con Dios o la Patria y demasiado poco con los hombres. De ese monólogo en común ha salido su enfermedad mental.
Los terroristas no son monstruos ni demonios. Son personas. Criminales, que debieran estar entre rejas. Pero personas, que guían sus acciones por ideas.
El diálogo entre los enemigos se ha dado a lo largo de la historia, EN MODO ALGUNO supone el reconocimiento o legitimación de la postura del otro, DE NINGUNA FORMA supone un acto de debilidad o de claudicación ante el otro interlocutor.
Históricamente, hablar no ha causado mayores daños, y sí que ha salvado muchas vidas. En el peor de los casos, hablar sólo lleva a que los enemigos se sigan reconociendo como tales y se continúe con el ejercicio de la violencia.
El diálogo no hace daño a nadie, el diálogo enriquece, acerca posturas, restaña heridas, resuelve equívocos, tiende un puente de entendimiento.
Por supuesto, pueden existir diferencias legítimas sobre aquello sobre lo que se puede negociar para alcanzar la paz. Tú tienes tu opinión, yo la mía.
Lo que no sólo es ilegítimo, sino inmoral, propio de visionarios fanáticos...es condenar el mismo proceso de diálogo.
A través de la historia, en pocas ocasiones los enemigos se han negado a parlamentar, sea directamente, sea a través de embajadas. Las consecuencias de esa intolerancia han sido indefectiblemente funestas.
Así pues, sí que se puede hablar con los terroristas. Es más, no solamente se puede: se debe. Para ello están los políticos, para entenderse, para solucionar nuestros problemas hablando. Para lo demás, están militares y policías.
Se debe hablar siempre. Aunque estuvieran matando, aunque ayer hubiera sido el atentado de Hipercor. Precisamente por eso: para que no haya otro.
Porque esa violencia, y casi diría que todas, viene de la falta de diálogo, de la incapacidad de asumir la existencia del otro. ETA nació en el franquismo, y se perpetuó en una Transición imperfecta.
Negar toda relación con el enemigo salvo para derrotarlo, es un escalón más de satanización del enemigo muy favorable para la consecución de tus propios fines, ya que conlleva la deificación de tu propio ejército (San Miguel que derrota al Maligno). El razonamiento miserable de que nada de lo que hace el contrario es justificable, lleva a que todo lo que se haga en su contra es justificable.
El PP está cayendo por una senda de fanatismo intelectual disfrazado de bonhomía que asusta. Otra muestra es la idea de guerra preventiva.
Si no luchamos contra estas ideas (criminalización del diálogo, justificación de la guerra preventiva) desde su base ideológica, pueden conseguir que el pueblo las acepte como naturales, en cuanto se le presenten con la verborrea ladina de funambulista de las palabras (Arenas, Acebes, Zaplana...).
Me pregunto con quien tendría menos que dialogar, con Otegui o con Raxoi. Siento similar desprecio por ambos, ya que ambos han prestado cobertura ideológica a la violencia. Uno justificando los crímenes de ETA, el otro, justificando la guerra en Iraq.
La participación de uno en la búsqueda de un apoyo social para la perpetuación de la "lucha armada", es decir, de los crímenes, ha sido condenada por la Audiencia Nacional por colaboración con banda armada (y así lo creo, pues su apoyo político era como oxígeno para ETA).
Pero el apoyo que el otro prestó, entonces perrillo faldero del innombrable, se puede considerar (esta vez no por la Audiencia Nacional, espero que sí algún día por el Tribunal Penal Internacional) como colaboración necesaria para poder llevar adelante el ataque a Iraq.
Recordemos: con España sentada en el Consejo de Seguridad, los esfuerzos diplomáticos del gobierno del PP, la gira de Aznar como alcahueta de Bush, intentando convencer al resto de los países de las ventajas que obtendrían si apoyaban la "intervención armada", es decir, guerra...la intoxicación de la opinión pública con mentiras sobre las armas químicas, o con inauditas relaciones con Al'Q'aeda...todo ello supone ser colaborador en el peor de los crímenes, en el crimen que contiene a todos los demás: la guerra.
A decir verdad, no me place reunirme con ninguno de los dos: son políticos, seres sin honor ni palabra, que no hablan verdad sino sólo aquello que conviene a sus intereses.
Tampoco me interesaría hablar con Hitler, un histrión a quien el pueblo convirtió en rey. Ni con Himmler, un mediocre mentecato. Pero sí por ejemplo con Goebbels, un criminal pero de vivaz oratoria. Con Franco sería imposible una charla de media hora, no daba para más el pobre cazurro gallego, pero sí por ejemplo con Ramiro Ledesma.
Con Bush no malgastaría mi tiempo, nunca me he sabido relacionar con deficientes mentales. Al fin y al cabo, no me interesa, es un mero peón. Pero si que me gustaría mantener una larga charla con Colin Powell, me pareció una persona sensata y con un algo de integridad, que no acababa de sentirse cómodo en el traje que le habían confeccionado.
Un lujo sería conversar con Benito XVI, o con el Putin. Gente que tienen todo mi desprecio pero también todo mi respeto intelectual.
El diálogo enriquece, no debilita tu posición sino que te acerca en el camino de la verdad, de la sabiduría, del entendimiento. No tiene vencidos y sí vencedores.
Es célebre, por poner un ejemplo, la entrevista que mantuvieron el papa León I y Atila. Atila se encontraba en la Península Itálica, y nada se interponía en el camino de sus huestes hasta las murallas de la Ciudad Eterna. Con el Emperador huido, el Papa jugó sus cartas y, finalmente, convenció a Atila de retirarse. Nadie sabe lo que hablaron, o cuáles fueron los acuerdos a los que llegaron, sin embargo, el hecho es que un Príncipe de la Iglesia fue a hablar con uno de los más sanguinarios y despiadados asesinos que han entrado en las páginas de los libros de historia. Hablaron, y Roma se salvó del pillaje de las tropas hunas (con lo que eso significaba: sangre y fuego) gracias a ese parlamento.
Por cierto: como dije, ante el diálogo puede haber distintas posiciones, todas ellas legítimas. Lo que no es legítimo es condenar a priori el diálogo (tampoco lo es condenar sólo una parte de la violencia, la que va en contra de nuestras posiciones ideológicas).
Una de esas posturas, es la mía. Por supuesto, como es la mía, la estimo como la más consecuente...pero sé que no es la única:
Mi posición ante la negociación es que no se le pueden dar beneficios por los asesinatos: sólo redención de condenas, y excarcelaciones para delitos no de sangre.
El gobierno debiera haber reconocido el derecho de autodeterminación antes de empezar el diálogo, desligándolo del alto al fuego, y reconociendo la primacía de la voluntad de los ciudadanos sobre la Voluntad Divina de la Sagrada Unidad de la Patria.
No lo ha hecho, y ahora soy el primero en decir que, hasta tiempo después de la entrega de las armas, no debiera hacerlo. Pero tengo claro que mientras no se reconozca el derecho de autodeterminación, es decir, no se cree un Estado democrático libremente asumido por las sociedades que lo integran, esa herida cerrará en falso. No existirá terrorismo, pero el problema político quedará irresoluto.
Se habrá ganado la guerra, las condiciones de rendición serán aceptadas por unos y consideradas insuficientes por otros (como siempre), pero no se habrá conquistado la PAZ, la cual nace de la libertad y la justicia.
Hay que saber analizar las circunstancias: ETA lleva años deseando dejar las armas, pero necesita una excusa. Saben bien que hay un topo en sus filas, que cada atentado "peligroso" que planean, es desbaratado, y así nadie se atreve a apretar el gatillo, pues tienes seguro que acabarás en la cárcel. Para ETA ya no hay salida.
Pero lo que no se puede esperar, lo que ningún analista político serio admitiría como escenario de resolución del conflicto, es una banda terrorista reconociendo sus pecados y entonando el mea culpa. Es entendible que para una persona que ha causado tanto dolor, y no sólo a sus víctimas sino también a su propio entorno, reconocer que su lucha ha sido una lucha absurda y estéril es algo demasiado duro de asumir.
ETA está buscando una coartada, una excusa para abandonar las armas sin perder la dignidad. Unos somos de la opinión que a enemigo que huye, puente de plata.
La AVT está claro que no quiere esa salida "digna" y pactada de ETA. Quiere ver a ETA arrodillada e implorando clemencia, y de paso el exterminio ideológico del mundo abertxale. Es una opción, es entendible...pero es irreal. Podemos, en todo caso, continuar con la vía policial y dilatar este proceso dejándolo en una violencia de baja intensidad, unos rescoldos que pueden apagarse por si solos o aprovechar una racha de viendo favorable para volver a levantar llamas.
Para cubrir esa postura intransigente, se les oye a los dirigentes de la extrema derecha decir cosas como: "No dialogar con ETA hasta que se haya disuelto". El Sr.Acebes juega a hacerse el tonto, y sus votantes, que comulgan con piedras de molino dialécticas, acaban tragando con ésta.
Si ETA se ha disuelto...¿con quién dialogas? Y aún mejor, una vez que se ha disuelto...¿para qué dialogas? Habrá que dialogar para que se disuelva, para promover las circunstancias que puedan acabar en esa disolución, ¿no? ¡La disolución es el fin del diálogo, no una premisa para éste!
Al final, es la monserga de siempre: "En democracia se pueden defender todas las ideas, pero sin la violencia". Con ese harapo se cubren las espaldas ideológicamente. Pero ese retal no llega para que se cubran las vergüenzas:
Se deja la violencia, se empiezan a poner ideas sobre la mesa, y entonces: "Ah, no. Con fulanito y con menganito, de entrada, no hablo". “Y de independencia, referendum, autodeterminación ...tampoco”.
Señores, entonces... ¿de qué se puede hablar? ¿con quién? ¿Qué diálogo es ese? Estos señores están acostumbrados a los "diálogos" de un cura con su grey desde el púlpito, de un leader en un meeting con sus suporters.
La condición en un principio era que no se hablaba mientras hubiera violencia. Luego el cese de la violencia no debía tener un horizonte temporal. Luego no valía con permanente, tenía que ser definitivo. Y ahora, primero tienen que desarmarse, y luego pedir perdón a las víctimas, y entregarse para asumir sus condenas de cárcel. Eso...para empezar a hablar.
¿Y a qué más esperamos? ¿A que canten la Marsellesa mientras hacen el pino-puente? Y si cumplen esa condición, ¿tendrán que hacerlo en lo alto de un trapecio, y sosteniendo naranjas en la nariz? ¿Cuál es la siguiente excusa idiota que se inventará Acebes para rechazar el diálogo?
El engaño es evidente: no quieren el diálogo, nunca van a aceptar el diálogo con ETA, haga ésta lo que haga, mientras no sean ellos los que se lleven la medalla de acabar con el terrorismo. El prestigio nacional e internacional del político que lo lograra le haría ganar varias elecciones consecutivas, y ese precio sí que es demasiado alto para pagar la paz.
El PP prefiere arriesgar la vida de personas, que podrían morir si ETA se siente traicionada y emprende una carrera suicida hacia delante retomando las armas, a arriesgar la victoria en las próximas elecciones y una redefinición en el concepto de España (que no es más que eso, una idea, una entelequia. España, como cualquier país, no tiene una existencia real fuera de los convencionalismos humanos).
Una organización terrorista independentista es la excusa perfecta para mantener al Estado en un estado de semi-excepción. Es un escenario en el que el PP se encuentra cómodo, y en el que cosecha muchos votos inflamando el odio anti-abertxale (cuentan con el apoyo unánime de los medios). Ellos empuñan la bandera nacional contra el separatismo vasco y catalán, y los buenos españoles se lo agradecen en las urnas.
Para toda esta jauría de fascistas, ETA no es mala porque asesine. Ellos han aplaudido, aplauden y aplaudirán al asesino, y le han dado cobertura ideológica. Justifican la violencia cuando viene de sus filas (desde Franco a Bush, y los que vendrán), al igual que hace HB con los suyos.
Lo grave que ha cometido ETA, su horrendo crimen, es querer romper la Sagrada Unidad de la Patria.
Por eso, cuando muchos trazamos una línea entre los que apoyan la violencia y los que no (y yo sitúo al PP al otro lado de esa línea); otros trazan la línea entre los que quieren matar a España y los que no. Y claro, así salen su identificación ETA=HB=PNV=ERC, todos ellos asesinos...de la Patria.
Al final todo se reduce a la idea filosófica de patria, y si ésta es de naturaleza superior al individuo. Llevamos a cuestas con ello desde Platón.
P.S: Espero no tener que hablar más de este tema. Estoy ahíto del País Vasco, Vascongadas, Euskadi, Euzkadi, Reino de Navarra, Nafarroa, Lapurdi, Iparralde y San Juan de Gaztelugatxe. Aún reconociendo su derecho a conformar libremente su ordenamiento administrativo y político, al margen del resto del Estado si lo estiman conveniente...EXISTEN OTROS PROBLEMAS MÁS INTERESANTES, URGENTES, IMPORTANTES.
Ni el derecho de autodeterminación, ni la propia actividad de la banda terrorista me parecen temas fundamentales que deban centrar el debate político, ni en Euskadi, ni mucho menos en el conjunto del Estado Español.
Más importante que la autodeterminación, es el derecho a una vivienda a un precio justo, a un trabajo adecuadamente remunerado y en condiciones de seguridad. A un trabajo dentro de la legalidad, cosa que casi ninguno cumple. Más importante que todo eso es el derecho de los indigentes a tener techo y plato todos los días, asegurado por ley y no por la caridad de ciudadanos menesterosos. Más importante es crear un mundo libres de guerras y rapiñas, donde ningún niño pase hambre ni ninguna niña tenga que firmar mojando el pulgar en tinta. Más importante que todo es enfrentarnos a un calentamiento global que amenaza la supervivencia de medio mundo, mientras que el otro medio está enloquecido por conseguir las últimas gotas de petroleo para quemar.
Más importante que el terrorismo de ETA son los accidentes laborales. Más grave es la violencia policial y la impunidad con la que se practica. Más numerosas son las agresiones fascistas de grupos de pelados, silenciadas por los medios de comunicación, pero que han causado más muertes en los últimos quince años que la propia banda terrorista desde la Transición (más de medio millar, las agresiones se cuentan por decenas cada fin de semana...eso si, no son militares, ni políticos ni periodistas sus víctimas).
Evidentemente, éste no es el tipo de violencia que va a condenar la AVT. No es la violencia de la que se escandaliza y alarma el PP, ya que no son ellos sus objetivos. Tampoco lo son jóvenes falangistas que esperan a Otegui frente a la Audiencia Nacional, son esos buenos españoles que acuden con banderas preconstitucionales al Santiago Bernabeu o a las manifestaciones de la AVT o de los obispos.
Hace tres años que ETA no mata (gracias desde luego a la eficacia policial, así como al creciente hartazgo de su entorno). En estos tres años han muerto por agresiones de neonazis más de una decena de personas, puede que muchas más, disimuladas en las estadísticas policiales como “violencia juvenil” o de “pandilleros”.
¿Me quiere alguien explicar porqué se habla tanto de ETA y tan poco de estos asesinatos? ¿Porque no son personas de calidad las víctimas? ¿O es que los asesinos no lo son tanto, porque matan por la Unidad de la Patria, y no para su disgregación? ¿No son importantes estos crímenes porque no monopolizan el telediario, o no lo monopolizan porque no son importantes? Ilegalizan a Batasuna, y no a Democracia Nacional, Falange Española, etc, etc, etc...
¿Me quiere alguien explicar porqué se le da tanta relevancia a un hecho y tan poca a otro que, objetivamente hablando (contando número de muertos), es mucho más grave?
Esos son los temas que me interesan, de los que me gustaría seguir hablando.
Por cierto, ¿os gusta esta hebilla? En ésta página podéis pillarla por 12€. Hay otros modelos muy molones, pasad y disfrutad: En España ES LEGAL.
No hay comentarios:
Publicar un comentario