1 de febrero de 2006

Al servicio del torturador








El 9 de marzo de 1997, cuatro agentes de la Policía Municipal de Vigo (Pontevedra) JUAN MANUEL PÉREZ RODRÍGUEZ , CELSO ALONSO BLANCO, SEBASTIÁN FERNÁNDEZ ESTÉVEZ y ELENA FERNÁNDEZ BOUZAS, detuvieron a MAMADOU KANE, ciudadano senegalés, en la Playa de Samil asegurando que lo llevaban a la Comisaría para ser identificado. En su lugar, los agentes llevaron a Kane en el vehículo policial hasta un monte. Durante el trayecto los policías golpearon a Mamadu Kane, propinándole golpes bajo las axilas al tiempo que le insultaban con frases como "gilipollas, vosotros sois una mierda, la culpa la tiene el Gobierno español por dejaros entrar, marcharos de nuestro país y mataos entre vuestras tribus".

Kane fue amenazado de muerte y retenido en el vehículo policial durante más de una hora. Finalmente fue dejado en libertad tras lo que acudió al centro médico, donde fue asistido de las lesiones que presentaba, y posteriormente al juzgado donde interpuso una denuncia.

El concejal de seguridad del Ayuntamiento de Vigo José Ramón Montero (Partido Popular) amenazó a Mamadou Kane con querellarse contra él por haberse inventado la denuncia de agresiones. Los cuatro policías habían sido condenados por la Audiencia Provincial de Pontevedra a penas de entre tres y cuatro años de cárcel, además de su inhabilitación durante diez años, lo que entrañaba su expulsión de la Policía Local.

La sentencia fue ratificada en 2002 por el Tribunal Supremo, que refrendó lo que se había demostrado en el juicio en Pontevedra. La Justicia resolvió que los cuatro policías secuestraron el 16 de marzo de 1997 al senegalés Mamadou Kane, al que llevaron a un monte cercano al campus universitario, donde le sometieron a insultos, agresiones y vejaciones.

En el juicio en la Audiencia Provincial, se presentaron varios testigos falsos, algunos de ellos funcionarios municipales, que hubieron de ser expulsados de la sala por el tribunal, bajo amenaza de procesarlos por perjurio. Sin embargo, aunque la justicia esclareció los hechos, los cuatro policías fueron indultados por el Gobierno el pasado mes de diciembre.

El indulto es una decisión administrativa, y no jurídica, que entraña el perdón para una persona condenada en firme. En el caso de los cuatro agentes, el indulto fue promovido por el Ministro de Justicia, Juan Fernando López Aguilar, con la anuencia del presidente Rodríguez Zapatero, a petición del ex juez y entonces alcalde de Vigo Ventura Pérez Mariño (PSOE) (foto en cabecera).

Bajo el mandato de José María Aznar, hubo varias peticiones de indulto por este caso, que el gobierno del Partido Popular siempre rechazó, dado el carácter de funcionarios públicos de los cuatro condenados, en cuanto supone un pésimo ejemplo social.

Los cuatro agentes que secuestraron y vejaron a Mamadou Kane ya patrullan por las calles viguesas como policías. Decir además, que en ningún momento hubo arrepentimiento por parte de los policías por los hechos ni han pedido perdón a Kane por las agresiones y la detención ilegal, lo que hace que el indulto sea aun más escandaloso.

Insulto Parcial
Denuncia
La CIG, UGT y el PSOE
BNG
Amnistía Internacional

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Desgraciadamente son pocas las ocasiones en que la víctima consigue probar la culpabilidad de sus torturadores -todo maltrato es tortura-, y cuando esto sucede, siempre hay algún alma cristiana dispuesto a perdonar al torturador y si es preciso -depende el grado de implicación del torturador con las alcantarillas del Estado-, ascenderle la categoría laboral.

Mendiño dijo...

¿Probarlo?

¿Y como?

¡Si la misma ley impide que haya testigos de las agresiones!

Digámoslo claramente: el sistema está confeccionado de forma que las torturas y abusos policiales se puedan desarrollar con total impunidad. El legislador así lo ha querido.

Una vez que te detienen, estás en sus manos, y te pueden hacer lo que quieras.